Ana se vuelve a Nueva York y deja Velvet Barcelona en las mejores manos. Todo está listo para la apertura de las galerías al público y a punto están de firmar con Eduard Godó la ampliación del préstamo que ya habían acordado. Sin embargo, sus nuevas exigencias e infinita ambición pondrán de nuevo en peligro dicho trato y provocarán un duro enfrentamiento entre Sergio, actual director financiero de las galerías, y él. El día de la apertura de las galerías, Velvet recibe una gran visita y una jugosa propuesta: la bailaora Carmela Cortés quiere que Raúl de la Riva diseñe sus trajes para el estreno de su último espectáculo en París. Claro que un diseñador de su talla jamás se ha prestado a diseñar batas de cola¿ ¿conseguirá Carmela conquistarle?